LA VOZ DEL SANDINISMO

Pobladores de Diriamba, en el departamento de Carazo, denunciaron la complicidad evidente entre representantes de la Iglesia Católica y los terroristas que tuvieron secuestrado durante varias semanas el municipio, impidiendo la libre circulación de las personas y del transporte internacional.

Las familias se congregaron este lunes en el parque central, frente a la Basílica Menor de San Sebastián, para exigirle al párroco padre César Castillo que entregue el templo al pueblo, el cual ha sido utilizado como refugio de los vándalos.

Le demandaron además que saque las armas que se encuentran en la Basílica.

“¡Que saque las armas, que salga el padre, queremos la Iglesia!”, reclamaron.

Este fin de semana se restableció la libre circulación, tranquilidad, seguridad y paz en Diriamba, donde la Policía Nacional fue recibida con alegría por las familias.
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